Portia. Una bodega en la que los detalles hacen la diferencia

Un edificio destaca en la N-1 km 170. Un edificio moderno con personalidad que le hace a uno despegar la mirada de la carretera por unos segundos, eso si, nunca suficiente para admirar toda su belleza.

Si además de la belleza del edificio, nos damos cuenta que es una bodega, del Grupo Faustino, bodega diseñada por el gran arquitecto, Norman Foster, la visita, no solo es obligada, sino deseada.

EL plan del sábado no puede ser más prometedor. Reserva en el restaurante de la bodega, en plena comarca Ribera del Duero, para degustar la especialidad de la zona, cochinillo y como no, regado por un vino de la propia bodega.Y el plato fuerte para después del café, visita a las bodegas. (www.bodegasportia.com).

Vista desde el Restaurante

La Catedral

He tenido la oportunidad de visitar otras bodegas como la bodega de Marqués de Riscal, en Elciego. que cuenta con un nuevo edificio diseñado por el arquitecto canadiense Frank Gehry que acoge el hotel Marqués de Riscal.  También, sin salir de Rioja Alavesa, en Laguardia, la bodega de Ysios del famoso arquitecto Santiago Calatrava proyectó una finca longitudinal que, desde una visión cenital, representa la forma de una copa de vino. Ambas sin duda, joyas arquitectónicas.

Sin embargo, Portia me ha impresionado por esa combinación de edificio singular y bello, original y creativo, propio de los grandes arquitectos de nuestro tiempo, que se han adentrado en el mundo del vino y algo que suele pasar desapercibido pero que es el objeto de la construcción: una grandísima funcionalidad. Nunca había visto una gestión de los espacios de tal forma que acompañe al ciclo de uva - vino de una manera tan ágil y eficiente. Al visitar la bodega eres consciente de que estás en una maravilla de edificio pero además sin duda, un edificio en el que la elaboración de vino además de arte, se convierte en un proceso muy natural. Sin lugar a dudas, la bodega más moderna que he visto, considerando su aspecto industrial.

El edificio tiene tres alas, que llaman pétalos y cada una de esas tres patas, acoge cada una de las tres patas del proceso en el vino, la fermentación, el tiempo en barrica, el tiempo en botella. La uva entra al edificio por el tejado, los tractores suben por uno de los pétalos, descargan en el corazón y bajan por otro de los pétalos. Sin duda el arquitecto, no solo ha pensado en la belleza sino también en el proceso de fabricación.

Madera, acero, vidrio y hormigón

El botellero de los vinos de autor

Desde luego recomiendo encarecidamente a todo el mundo que tenga la oportunidad, no desaprovechar la oportunidad de visitar una de las bodegas más impresionantes que se pueden encontrar en el mundo. Se podrá visitar una joya de la arquitectura moderna, una fabrica en la que el diseño acompaña de forma eficiente lo proceso de elaboración del vino. Se podrá conocer como se elaboran vinos de inmensa calidad y terminar con la cata de dos de los cuatro vinos que se producen en la bodega, su vino crianza, Portia Crianza y Portia Prima, vino este último galardonado internacionalmente. Además es el único sitio, en el que se puede comprar su joya de la corona, Triennia, un vino excelso que no se produce todas las campañas porque la uva debe cumplir con los más altos estándares de calidad.