¿Quieres bajar de peso? ... duerme lo suficiente
Es sorprendente comprobar como comiendo sano, haciendo deporte uno puede comprobar que se estanca en la bajada de peso y algún día que se ha dado un capricho, acaba bajando de peso. El cuerpo tiene sus inercias. No existe una reacción inmediata a los buenos hábitos. Va cambiando su metabolismo. Pero es increíble comprobar que entre una y otra situación lo que ha cambiado es que hemos dormido mas y mejor.
Decir que la gente que duerme más acaba comiendo menos (y teniendo menos hambre) puede ser demasiado simplista, pero en esencia, eso es lo que múltiples estudios han concluido.
Dos estudios encontraron una relación entre la privación del sueño y la propensión a subir de peso. En un estudio publicado en el año 2012 titulado “Short Sleep Duration, Glucose Dysregulation and Hormonal Regulation of Appetite in Men and Women", los participantes consumieron 300 calorías de más después de dormir 4 horas la noche anterior en lugar de haber dormido 9 horas. Un estudio del año 2006 llamado "“Association Between Reduced Sleep and Weight Gain in Women", siguió a más de 68.000 mujeres por 16 años. El estudió encontró que aquellas mujeres que dormían 5 horas o menos por noche tenían más probabilidad de subir de peso comparadas con las que dormían 7 horas por noche.
La privación del sueño aumenta los niveles de una hormona llamada ghrelina, que aumenta el apetito; y disminuye los niveles de una llamada leptina, que indica al cuerpo que estás satisfecho al comer. Entonces, las personas que duermen menos tienden a comer de más. También se ha demostrado que las personas que experimentan privación del sueño son más propensas a consumir alimentos ricos en carbohidratos de alto contenido calórico. Cuando estás privado de sueño es probable que estés menos dispuesto a hacer ejercicio. Esto es por que el cansancio puede influir no sólo en tomar decisiones como si comer o no una galleta, pero también sobre si ir al gimnasio o subir por las escaleras en lugar del ascensor.
Decir que la gente que duerme más acaba comiendo menos (y teniendo menos hambre) puede ser demasiado simplista, pero en esencia, eso es lo que múltiples estudios han concluido.
Dos estudios encontraron una relación entre la privación del sueño y la propensión a subir de peso. En un estudio publicado en el año 2012 titulado “Short Sleep Duration, Glucose Dysregulation and Hormonal Regulation of Appetite in Men and Women", los participantes consumieron 300 calorías de más después de dormir 4 horas la noche anterior en lugar de haber dormido 9 horas. Un estudio del año 2006 llamado "“Association Between Reduced Sleep and Weight Gain in Women", siguió a más de 68.000 mujeres por 16 años. El estudió encontró que aquellas mujeres que dormían 5 horas o menos por noche tenían más probabilidad de subir de peso comparadas con las que dormían 7 horas por noche.
La privación del sueño aumenta los niveles de una hormona llamada ghrelina, que aumenta el apetito; y disminuye los niveles de una llamada leptina, que indica al cuerpo que estás satisfecho al comer. Entonces, las personas que duermen menos tienden a comer de más. También se ha demostrado que las personas que experimentan privación del sueño son más propensas a consumir alimentos ricos en carbohidratos de alto contenido calórico. Cuando estás privado de sueño es probable que estés menos dispuesto a hacer ejercicio. Esto es por que el cansancio puede influir no sólo en tomar decisiones como si comer o no una galleta, pero también sobre si ir al gimnasio o subir por las escaleras en lugar del ascensor.
Comentarios